>
Hoy e ido a la piscina. ¡Vaya coñazo! Niñatos que te dan con la pelota, niños llorando y mojándote cada dos por tres, el horroroso hilo musical de Cadena Dial, etc, etc. A ver, si es que aunque no me guste tiene que ir uno de vez en cuando para socializarse un poco y no quedarse aislado del mundo. ¡Y mira que me gustaba esa piscina! Dentro de lo malo, era tranquilita y baratita pero a ver, se ha tenido que correr la voz y ahora esta hasta la bola de gente. Menos mal que por lo menos he podido aprovechar el tiempo en algo útil y me he leído de tirón este libro. Desde que leí de chiquitillo Juan Salvador Gaviota, este autor, me cautivo por completo. De echo, he podido leer esta historia de la gaviota obsesionada por volar más rápido por lo menos diez veces. Después conocí otras obras tales como Alas para vivir, El don de volar, Ilusiones… Y este último, que me lo compre hace algún tiempo y todavía no le había metido mano. Ha sido la lectura ideal para este coñazo de día de piscina ya que este autor es de los pocos que me transmite una sensación única de libertad, de vuelo, de complicidad con aquellos que no disfrutamos de los gustos de la mayoría… Como por ejemplo, un día en la piscina rodeado del borreguismo colectivo perdiendo el tiempo.
mi blog más antiguo 